ACORDAR
Además
de los supuestos que damos por
sobreentendidos en nuestros diálogos, los acuerdos
no acordados explícitamente también causan daño a las personas en sus
relaciones laborales, más aún cuando las exigencias entre las partes
involucradas son dispares. En ese caso, los resultados sólo conforman a una de
ellas y en la otra generan conflictos internos que no siempre se resuelven
pacíficamente al exteriorizarlos, más aún cuando se deja pasar el tiempo sin
resolver dichos conflictos con el pretexto de no empeorar las cosas, o por
simple desidia.
Etimológicamente,
el término castellano acuerdo proviene del verbo latino accordare [1],
el cual hace referencia al ‘cor – cordis’,
es decir, al corazón. La palabra se completa con la “a” que en latín hace las
veces de una preposición que denota origen (complemento circunstancial de
lugar), y que en castellano es como decir que proviene ‘de’ o, ‘desde’. Si a
esto sumamos las posibles definiciones semánticas indicadas en la nota [1], podemos
acordar que tomando la primera
acepción indicada para el uso dado a accordare,
hacer acuerdos es resolver o determinar
algo conciliando voluntades y quereres según la concordancia de los corazones
de dos que decidieron algo en común.
Con
la misma explicación, tomando otra de las acepciones de acordar, cuando digo: me acuerdo de…, no sólo estoy haciendo memoria con mi sentido interno
homónimo, sino también sacando algo desde el corazón,
como quien comparte el fruto de una experiencia vivida desde su integralidad
personal, como lo que somos: una persona
única, y no como uno que siente, piensa y vive por partes, aunque a hay veces
en que las divisiones internas sufridas nos hacen sentirnos múltiples, ante
nosotros mismos y ante los demás. Esto no nos deja conformes, pues estamos tironeados
internamente y no logramos ponernos de acuerdo ni siquiera con nosotros mismos.
Esta es la común experiencia de cuanta persona humana se precie de ser tal en
esta historia de la humanidad.
Celebrar acuerdos,
por una parte es pactar algo exteriormente, que puede o no convalidarse con
firmas, sellos y garantías, y que en el mejor de los casos beneficiará a los
dos involucrados. Los beneficios tienen múltiples formas materiales, las económicas
entre ellas son las más conocidas, e inmateriales como ocurre cuando se
acrecienta nuestro honor, fama y buen nombre. Por otra parte, es celebrar haberme y haberte aportado paz
interior en tanto hemos pactado
desde el corazón, de acuerdo con nuestros sentimientos y convicciones, con
delicadeza, respeto, ternura, esperanza
y sentido trascendente.
Celebrar acuerdos debería ser
siempre un buen motivo para festejar los éxitos compartidos
(win to win: para que ganemos todos,
les gusta decir a los popes del Management, los maestros de la Administración de
Empresas). Puede parecerte raro, o idílico, hablar de los acuerdos en estos términos en el
mundo de las empresas y en las empresas del mundo, pero es el modo de
aportarles humanidad, calidad y calidez humana. De ello estoy convencido.
Por
eso te propongo que revises seriamente cuáles
son los acuerdos que hasta hoy rigen tu vida, que analices y concluyas si
han sido libre y explícitamente celebrados y asumidos por ambas partes o no, si
vale la pena, o mejor dicho la alegría de seguir manteniéndolos porque te
permiten seguir festejando éxitos o, si son mochilas cada vez más insoportables
de llevar. En este último caso, vaya negocio !!!
Recuerda, mientras vamos de camino
sólo nos queda acordar, porque los resultados de hoy son los frutos de los
acuerdos celebrados, o no celebrados, ayer.
Anímate hoy a celebrar acuerdos, y a
celebrarlos mañana también 😊😊😊
[1] Cfr.
Diccionario de la Real
Academia Española © Todos los derechos reservados.
http://lema.rae.es/drae/?val=acordar Acordar: Del lat. *accordāre, de cor, cordis,
corazón. 1. tr. Determinar
o resolver de común acuerdo, o por mayoría de votos. 2. tr. Dicho
de una sola persona: Determinar o resolver deliberadamente. 3. tr. Resolver,
determinar algo antes de mandarlo. 4. tr. Conciliar,
componer. 5. tr. Traer
algo a la memoria de otra persona.. 6. tr. recordar ( traer a
la memoria). U. m.
c. prnl. Acordarse DE un hijo
ausente. 7. tr. Mús. Disponer o templar, según arte, los instrumentos musicales o las
voces para que no disuenen entre sí. 8. tr. Pint. Disponer armónicamente los tonos de un dibujo o de una pintura. 9. tr. ant. Hacer a alguien volver a su juicio. 10. intr. León, Bol., Hond. y Ur. caer en la cuenta. 11. intr. ant. Dicho
de una cosa: Concordar, conformar, convenir con otra. 12. intr. ant. Dicho
de una persona: Volver en su acuerdo o juicio. Era u. t. c. tr. 13. intr. ant. despertar (‖ del sueño). U. en Salamanca. 14. prnl. Ponerse de acuerdo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario