Salir del
antropocentrismo despótico:
una invitación
ética para nuestro tiempo
En un mundo marcado por la
crisis ambiental y la pérdida de valores, recuperar una mirada ética sobre
nuestra relación con el planeta es más urgente que nunca. Los valores
personales, sociales y ambientales no solo orientan nuestras decisiones:
también sostienen la convivencia, fortalecen a las comunidades y crean las
condiciones para un futuro más justo y equilibrado.
La perspectiva de la ecología
integral, inspirada en la Encíclica Laudato Si’, nos ayuda a
comprender esta interdependencia. El Papa Francisco propone nueve claves que
atraviesan este enfoque: la íntima relación entre los pobres y la fragilidad
del planeta, la certeza de que todo está conectado, la crítica a la tecnocracia
y a los modelos de poder basados en la tecnología, la necesidad de repensar la
economía y el sentido del progreso, el valor intrínseco de cada criatura, el
auténtico sentido humano de la ecología, la urgencia de promover debates
sinceros y participativos, la responsabilidad ética y política, tanto global
como local, la superación de la cultura del descarte mediante nuevos estilos de
vida.
En ese marco, invita a dejar
atrás el antropocentrismo despótico, esa visión que coloca al ser
humano como dueño absoluto de la creación y que legitima prácticas de
explotación sin límites. Superarlo implica reconocer el valor propio de cada
criatura y asumir nuestra responsabilidad en el cuidado de la casa común.
Desde la ecología integral
—ambiental, social y económica— los valores se convierten en criterios que nos
ayudan a preferir y elegir comportamientos que favorecen el bien común,
la sostenibilidad y la plenitud humana.
Adoptar este paradigma
significa elegir valores que promuevan el bien común, la
sostenibilidad y la plenitud humana. No es una propuesta ideológica ni
religiosa: es una apuesta por un sentido común más humano, más consciente y
solidario.
Construir un futuro sostenible comienza por revisar nuestras creencias, nuestras prioridades y nuestras decisiones diarias.

No hay comentarios:
Publicar un comentario